Cinco pequeños poemas. Por Javier Bengoechea.
Una carta de amor. Por María Ángeles Maroto.
1.
Mi amor te dí
mi amistad te brindé
mi mano te tendí.
Para que te enamoraras de mí
2.
Siempre me amarás.
Lo sé porque todo tu amor me entregaste
aunque después dudaste.
Y el corazón roto me entregaste.
3.
Cuando te de una carta
no la tires al rincón.
Porque la carta es mi alma
y los versos mi corazón.
4.
Solo, sabía que no llegaría lejos
Hasta que con tus alas, mi amor,
me hiciste llegar hasta el cielo.
5.
Quisiera ser un picaflor
pequeñito y volador
para posarme en tu pecho.
Y cantarte coplas de amor.
Una carta de amor.
En la orilla de un río me encontré una flor, cogiéndola del suelo la guardé en mi corazón hasta el día que me case y se la entregue a mi amor. Después de cinco años de casados, ante una crisis, mi amor al tren se echó dejándome una nota con la flor marchitada. La nota decía "tu has sido la persona mas importante en mi vida, te he querido mucho y te he amado mucho, me has dado la vida, la alegría, la amistad y todo tu amor ha estado conmigo cuando más lo necesitaba, cuando enfermo estaba, cuando triste estaba. Nunca te olvidaré y siempre te amaré, pero ya no puedo soportar más este dolor que me consume por dentro, que me está matando, que me está dejando sin fuerzas, sin aliento. Esta enfermedad que me está matando poco a poco y me está haciendo sufrir, esta enfermedad que a ti también te hace sufrir y que por las noches no te deja dormir. Por eso, para que ninguno de los dos sufra más me voy a las vías del tren a esperar el tren que me matará y me quitará la vida, esa vida que tan unida estaba a ti y que acabará con nuestro dolor y sufrimiento. Siempre estarás en mis pensamiento y en mi corazón".
